Victoria reglamentaria, pero Campeones del Mundo

El pasado sábado, el club más laureado del fútbol europeo sumó un nuevo título a sus vitrinas: su 5º Mundial de Clubes.

Tras haber derrotado por 1-4 al Al-Ahly de Egipto, los merengues se iban a enfrentar al campeón de Arabia, el Al-Hilal, equipo que, aunque aún está a mil años luz de codearse con los clubes europeos, contaba con una dupla en la delantera con pasado en la liga española y portuguesa, que le iban a dar unos cuantos sustos al Real Madrid. Hablamos en este caso de Luciano Vietto, futbolista argentino que militó en Villareal, Atlético de Madrid, Sevilla y Valencia como última etapa ibérica, y a su lado, el alto y robusto Moussa Marega, quien jugó muchos años en la Liga portuguesa en el C.S. Marítimo y el FC Porto.

Pese a la buena noche de la que gozaron estos dos puntas, marcando dos goles Luciano y uno Marega, no lograron superar el hambre voraz de la delantera madridista, la cual se encargó de encarrilar rápidamente el partido el partido para los blancos en los primeros veinte minutos. En primer lugar, Vinicius Jr definía en 1vs1 contar el portero del Al-Hilal tras una asistencia entre líneas de Karim Benzema y cinco minutos después, Federico Valverde, que ya venía de marcar en las semis, así como Vini, iba a aprovechar un rechace en el área para enganchar una volea en la que el guardameta pudo hacer algo más, pero acabó colándose en las mallas.

Los minutos siguientes se resumen en un asedio constante del Madrid buscando rematar la faena, sin embargo, este énfasis desatado por marcar el tercer gol dejó una defensa descolocada en la que Alaba Rüdiger y perdieron la marca a sus espaldas de Marega, que con una carrera desde el centro del campo iba a batir a Lunin para meter el miedo en el cuerpo a los de Ancelotti. Finalmente, el encuentro se fue con 2-1 al descanso.

La segunda mitad siguió el mismo guion que la primera: un Madrid dominador pero atascado acaba recurriendo a una genialidad de Vinicius. Esta vez lo iba a hacer en forma de asistencia, con el exterior y desde la banda, para asistir a Karim Benzema en el minuto 53. Y de nuevo, cinco minutos más tarde, Fede firmaba su doblete tras una asistencia perfecta de Carvajal. Pero como en la primera parte, los blancos volverían a encajar a las espaldas de sus centrales, que no firmaron su mejor partido, y ya que estamos, tampoco su mejor temporada. Vietto iba a poner el 4-2 definiendo a la derecha de Lunin.

Los siguientes minutos fueron de infarto, el Al-Hilal se vio con posibilidades de empatar el encuentro, y se encargaron de dar un susto enorme a los madridistas con dos ocasiones que terminaron fuera. Por suerte para los de Carletto, de nuevo la inspiración del MVP del partido, Vinicius, y el buen estado de forma de Ceballos, que entró en el 61’, lograron poner el 5-2 tras una combinación en el área y una definición perfecta del brasileño al palo largo. El partido se convirtió en un ida y vuelta en el que el Madrid se lo tomaba todo con mucha calma y el equipo árabe trataba de buscar la remontada sin apenas energías. Finalmente, en el 78’ Vietto conseguía firmar un doblete para poner el tercero de su equipo en el marcador, pero esta vez definitivo. 5-3 terminaría la final del Mundial de Clubes que se iba a llevar el Real Madrid por 5ª vez en su historia.

A destacar para bien en el Al-Hilal los ya mencionados Vietto y Marega, y para mal, su portero, que pudo hacer mucho más sobre todo en los dos primeros goles madridistas. El equipo campeón de la liga de campeones árabe peleó más de lo esperado. Partido meritorio del Al-Hilal, que con actuaciones como la de esa noche comienzan a reivindicar el ya en crecimiento, futbol árabe.

Por parte del Real Madrid, partido para mirarse el ombligo pese a la victoria, sobre todo por la defensa: un Rüdiger que juega como último hombre necesita transmitir más fiabilidad. Con su velocidad y fuerza corrige sus errores de marcaje, pero no pueden cogerte la espalda tan fácilmente. Por otra parte, Alaba, que vale que viene de lesión, pero no está firmando su mejor temporada. En resumen, no Militao, no party. También me parece necesario destacar el mal partido de Tchouaméni, que también viene de lesión y también viene realizando partidos bastante alejados del nivel que dio a principio de temporada. En especial le está costando aprender a realizar esa presión cuando su equipo no tiene balón por delante de Kroos y Modric, muchas veces recupera, pero se desata incorporándose al ataque. Es una tarea pesada ser la sombra de Casemiro.

Por último, destacar el temporadón del jugador que actualmente es el mayor foco de críticas de la prensa española: Vinicius Junior. Con sus dos goles y asistencia en la final firma ya 16 dianas y 7 asistencias en lo que llevamos de temporada a falta de más de veinte partidos. El brasileño es el máximo goleador del equipo y su mayor referencia en ataque. A él las críticas no le importan, es más, se podría decir que le hacen más fuerte, haciéndonos recordar a su mayor ídolo, reconocido por el propio Vinicius: Cristiano Ronaldo.