VETERANOS Y NOVELES ASALTAN ANFIELD

El Madrid y Vinicius bailan al Liverpool en un Anfield que reclama lo que es un secreto a voces: fin de ciclo.

Otra noche europea mágica de los blancos, otra remontada más, sin embargo, esto no sería noticia si no fuera porque, además, ¡lo han hecho en Anfield! Una vez más, otra vez, el campeón de Europa volvió a darle la vuelta a un partido en el que el contexto era el siguiente: minuto tres, Salah filtra un pase de fantasía para Darwin Núñez que define de tacón, marcando así un auténtico golazo que ponía la piel de gallina a los madridistas. Los siguientes diez minutos fueron un asedio del Liverpool por la banda derecha gracias a un Salah totalmente inspirado, que tuvo el segundo en sus pies tras una conducción en diagonal hacia la portería, no obstante, su gol no iba a llegar hasta el 14’, cuando un balón relativamente fácil llega a los pies de Courtois, el cuál comete un fallo de coordinación tan grave que le deja el balón en bandeja al egipcio para que ponga el 2-0 en el marcador.

Sin embargo, el Madrid tiene la suerte, o la virtud, de contar con guerreros de mil batallas como Luka o Karim, y, además, gozan del talento de una nueva estrella: Vinicius Junior. El brasileño fue sin duda alguna el líder de la remontada, desquiciando a la defensa del Liverpool cada vez que recibía el balón, y en especial con un golazo al palo largo de Alisson para poner el 2-1 e iniciar la gesta en el 21’. A partir de ese gol, al equipo blanco le cambia la cara, y tras varios intentos, y con algún susto de por medio, en el 36' Vinicius de nuevo, fuerza un error de Alisson gracias a una presión constante que hace que el meta se equivoque en el pase, rebote en el pie del delantero del Madrid, y entre en la portería “red”. 2-2 se iban al descanso los dos equipos, pero se olía que no terminaría así.

La segunda mitad comienza como acaba la primera, acecho madridista. Y es que no iba a tardar mucho en llegar el gol que confirmase la remontada, pues en el primer minuto de juego, Vinicius de nuevo, realizaría un recorte que dejaba casi fuera de jugada a Arnold, lo que le obliga a realizar una falta casi dentro del área que le iba a costar carísima. El mítico pie derecho de Luka Modric asistía a la cabeza de Militao que remata solísimo y pone el 2-3. El resto del encuentro sería un paseo para el Madrid, y poco tardaría Karim en firmar un doblete combinándose con sus dos compañeros brasileños en ataque: con Rodrygo en el 55’ gracias a una pared perfecta en el área, y con Vinicius en el 67’ tras un contrataque perfecto liderado por Luka Modric y rematado por el francés dejando tirado a Allison con un recorte de fantasía.

Desde luego, los blancos podrán no estar firmando su mejor temporada, en especial en liga, pero como todo el mundo sabe, llega la Copa de Europa y el equipo se transforma: Militao demuestra una vez más que es uno de los tres mejores centrales del mundo, Nacho sale del banquillo y anula el partido de Salah por completo, Camavinga juega como si llevara veinte años en el club, Valverde vuelve a ser Valverde, Karim y Luka sacan los balones de oro a relucir, y por último y más importante, Vinicius se consagra como la estrella tan esperada en la casa blanca.

El Real Madrid Club de Fútbol firmó en Anfield un partido para la historia, la primera vez que al Liverpool le encajaban cinco goles allí en competición europea. La segunda parte del equipo de Carletto se trató de un auténtico homenaje al futbol de contraataque, pero por encima de todo, fue un homenaje al lema que hizo, hace y seguirá haciendo leyenda en la casa blanca: hasta el final, vamos Real.