El Athletic de Valverde se reencuentra con el gol
- Antonio García del Pino Martín
- 22 ago 2022
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 29 ago 2022

Tras un debut liguero un tanto desesperante, los del "txingurri" vencieron con un zurdazo de Berenguer a un Valencia que se quedó a centímetros del empate.
A nadie dejó indiferente el Athletic en su debut liguero ante el Mallorca, pues se hacía realmente difícil entender cómo los leones no fueron capaces de perforar la red visitante. No sería una cuestión de ocasiones, tampoco una cuestión de buen juego, el Athletic jugó bien y creó ocasiones, las suficientes como para obtener un resultado cómodo. El problema fue el que viene siendo habitual los últimos años: el gol. Y esa y no otra, era la asignatura pendiente de los rojiblancos en su segundo partido, de nuevo en San Mamés, ante el Valencia de Gennaro Gattuso.
Con un solo cambio en la alineación, el de Villalibre por Nico Williams, que desplazaba a Iñaki a la posición de nueve; así afrontaban los de Valverde la cita liguera. No sin antes presenciar un sentido homenaje a Iker Muniain, que recibía de manos de Markel Susaeta y de Jose Ángel Iribar el brazalete original junto a una piedra del antiguo San Mamés, todo ello en una peana de roble, con motivo de sus 500 partidos con la camiseta rojiblanca.
Daba comienzo el encuentro, y de nuevo vimos a un Athletic valiente e incisivo en la presión, como ya se vio en el partido contra el Mallorca, pero que una vez más se encontraba una y otra vez con la defensa rival. Liderados por un Iker Muniain sobresaliente, los leones ofrecieron unos primeros veinte minutos de mucha calidad al público de La Catedral, que de nuevo llenó sus gradas para presenciar el encuentro. De las botas del capitán rojiblanco nacería la primera ocasión clara del encuentro, pase espectacular entre líneas para Alex Berenguer que estrellaría el balón contra el cuerpo de Mamardashvili.
Fue nada más cumplirse el minuto 20 cuando veríamos la primera ocasión del Valencia, que Castillejo se encargaba de mandar a las nubes cuando todo el estadio enmudecía imaginándose lo peor. Tras ello, el Valencia despertó, y empezó un bonito partido de tu a tu entre dos de los equipos más valientes de lo que llevamos de liga. Hasta que, en el minuto 42, después de un fallo en salida de balón de Carlos Soler, el Athletic se adelantaba tras un gran zurdazo desde fuera del área de Alex Berenguer, en el cual Mamardashvili puede hacer algo más. Todavía quedaría tiempo para que le anularan un gol a Iñaki Williams por fuera de juego, a la salida de un córner. Con ello terminaba la primera parte, dejando un hilo de esperanza en la grada de San Mamés, que veía como al fin su equipo era capaz de marcar un gol.
Con el comienzo del segundo periodo seguiría la misma dinámica de partido bonito e igualado que tuvimos en la primera parte. Estuvo a punto de nuevo Castillejo de perforar la red bilbaína con un zurdazo desde fuera del área que pasó muy cerca del palo de la portería defendida por Unai Simón, que volvió a dejar a cero. Sería entonces cuando Valverde empezaría a mover el banquillo, dando entrada a Zarraga y a Unai Vencedor, que está disputando menos minutos con el "txingurri" que los que disputaba con Marcelino, donde era titular indiscutible. También daría entrada el extremeño a Raúl García, cambio más que habitual en los partidos del Athletic, sobre todo cuando el equipo necesita algo de calma en su juego y ser efectivo arriba. El sustituido en este caso sería Iker Muniain, que volvió a dejar una exhibición de buen fútbol, y ya van unas cuantas en este año 2022.
En el minuto 80, Nico, el pequeño de los Williams encontraría el gol tras un gran centro de su hermano Iñaki, pero este sería anulado por fuera de juego. Quedaban 10 minutos de sufrimiento para la parroquia rojiblanca.
Supo sufrir el Athletic los arreones de los chés, sin tener que obligar a Unai Simón a trabajar en exceso. Llegado el tiempo de descuento, y con las incorporaciones desde el banquillo de Capa y Morcillo (que hacía tiempo que no se veían por San Mamés), llegaría la ocasión que dejó a todo Bilbao con el corazón en un puño. Tras un balón largo digno del minuto 95, recogía Marcos André el esférico en el pico del área, y tras driblar a Vivian y Vesga (ambos no tuvieron su mejor partido) definiría ligeramente desviado ante lo que parecía ser un paradón de Unai Simón. Enmudeció La Catedral, pero tras ver el marcador con el tiempo de descuento cumplido, no tardaron en llegar los aplausos y los cánticos ante lo que suponía la primera victoria de la temporada.
Salvó el Athletic los muebles en casa, convenciendo con su juego pero no tanto con su efectividad. Es precisamente la efectividad la asignatura pendiente de este equipo desde la marcha de Aritz Aduriz, que, para conseguir el objetivo de entrar en puestos europeos, va a necesitar encontrar el gol con más facilidad.
Fue sin duda bonito el duelo que nos dejaron Athletic y Valencia, dos equipos que si solucionan el tema del gol, veremos en puestos altos de la tabla al final de la temporada.
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